Tulipán. La belleza hecha flor.

El tulipán negro.

El tulipán negro no es una flor. Cuando yo era un tierno infante mi afición por la lectura era bastante. Recuerdo mi primera colección de libros. Tapas de cartón, dibujos en un rombo en la portada y encuadernados en vivos colores que llamaban la atención de un niño como yo.

Recuerdo perfectamente toda la colección pero especialmente dos títulos que a pesar del paso de los años han perdurado en mi mente. El primero se titulaba «la guerra de los botones». Trataba sobre las aventuras de un grupo de niños franceses en su pueblo y sus batallas con los pequeños del pueblo de al lado.

El segundo era «el tulipán negro». Una especie de héroe con semejante al zorro pero cuya firma era un tulipán negro.

Esa fue mi primera relación con esta bella flor y sigo admirándola desde entonces por muchas causas.

Historia del tulipán.

Hoy en día todo el mundo relaciona los tulipanes con un país en concreto. Este país es Holanda. Pero por raro que parezca no hace tanto tiempo que el tulipán llego a Europa. Su origen es más antiguo y más lejano.

Origen del tulipán.

Se cree que originariamente esta bella flor se encontraba silvestre en oriente. Pero no como otras flores exóticas en el lejano oriente. Se cree que su origen está en el actual Kazajstán.

Realmente, aunque se sitúan en esta zona, se cree que había un corredor alrededor de los 40 grados norte que es su zona ideal y originaria. Este corredor comenzaría en el norte de China y acabaría casi en el sur de Europa.

El tulipán en Turquía.

Aunque, como decimos, los tulipanes hoy en día se identifican con Holanda, anteriormente ha tenido otro país del que ha sido prácticamente símbolo nacional. Se trata de Turquia.

El cultivo y uso del tulipán en Turquía se conoce desde hace siglos. De hecho el nombre con el que lo conocemos actualmente procede de una palabra turca. tulbend es como se denomina a los turbantes de la nobleza turca. La forma de estos accesorios, erguida, recuerda a esta flor y de ahí el traslado del nombre a Europa y al resto del mundo.

Allí se celebraba una vez al año el festival de los tulipanes en que esta bella flor era la protagonista.

El tulipán llega a Europa.

La llegada del tulipán a Europa se produce en el último tercio del siglo XVI. Desde su conocimiento y uso en Turquía llega su fama a Europa. Debemos agradecer su conocimiento en profundidad y el cultivo de muchas de sus variedades a Clusius. Clusius era el prefecto del Jardín Medicinal Real de Praga. Conoció y cultivo la flor como nadie en su época.

Debido a alguna de las persecuciones religiosas comunes en la edad moderna Clusius debió emigrar. Pero no emigró solo, se fue acompañado de una basta colección de bulbos de tulipán.

El destino lo llevó hasta Holanda en el año 1593. Allí se convirtió en director de los jardines botánicos de Leiden. A pesar de que el fin de estos jardines era eminentemente medicinal Clusius no pudo evitar plantar toda su colección de tulipanes. Aquí empieza la relación de este país atlántico con el tulipán.

Holanda y el tulipán.

En Holanda la fama del tulipán creció de una forma desproporcionada. Como ocurre con muchos cultivos, ganados y por supuesto plantas y flores los productos se subastan.

En el caso del tulipán hubo un tiempo en que se valoró desmesuradamente. Se pagaba por un bulbo de tulipán de determinadas especies lo que podía valer una casa en el mejor barrio de Amsterdam.

El tulipán es el responsable de una de las mayores crisis financieras que conoció Holanda. Fue en el año 1637. El precio del tulipán estaba por las nubes. Pero de forma repentina su precio se desmoronó llevando a muchos inversores, y al propio país, casi a la bancarrota. Es la conocida época de la tulipomanía.

El tulipán en la actualidad.

Actualmente Holanda sigue siendo el primer productor y exportador mundial de tulipanes. El 88 % del terreno dedicado al cultivo de esta flor está en este lugar. Muy lejos se encuentren otros países como Nueva Zelanda, Alemania, Polonia, Francia o Japón.

Los tulipanes como planta.

Más allá de la historia reciente del tulipán estamos hablando de una flor que podemos cultivar en casa y que es de las más bellas que podemos tener en una maceta.

Características del tulipán.

El tulipán nace a raíz de un bulbo. Es decir desde un bulbo que está bajo tierra y que es fuente de alimentación inicial de la flor nace la planta. Cuando ya está desarrollada puede llegar a tener entre treinta y sesenta centímetros de altura dependiendo de la variedad.

Su aroma es casi nulo, no es esto lo que hace especial al tulipán. Es su aspecto lo que lo hace único. Su forma y la intensidad de sus colores han enamorado al ser humano desde siempre.

El cultivo del tulipán.

Para cultivarlo lo mejor es plantarlo en otoño. De esta manera se desarrolla durante el invierno y florece esplendorosa en primavera. Los bulbos tienen la forma de esa peonza con que los niños juegan.

La parte redonda se coloca hacia abajo y la puntiaguda hacia arriba. Si la plantamos en nuestro jardín debemos colocarla en un sustrato ligero y bien aireado y con una profundidad de unos quince centímetros.

En el jardín colocaremos los bulbos con unos diez centímetros de distancia para que no se molesten al nacer y desarrollarse. Finalmente durante el invierno debemos abonarlo una vez al mes más o menos. Y veremos como florecen en primavera.

Los tulipanes en casa.

Pero donde más luce una planta con flores de tulipán es en una maceta dentro de nuestro hogar. Vamos a explicar un poco más en detalle el proceso.

El tulipán en la maceta.

Primero. La maceta que usaremos debe ser lo bastante grande para que crezcan cómodos. Lo mejor es que sea circular por el aspecto que luego ofrecen.

Preparamos el sustrato que como hemos dicho debe ser ligero mejor con cierta cantidad de arena para ser más permeable. Una vez tenemos la tierra en la maceta hacemos un hueco para colocar el bulbo. Tapamos sin oprimir excesivamente y regamos.

El riego debe ser abundante pero no excesivo. La tierra debe estar húmeda, no embarrada.

Es conveniente que el lugar esté bien iluminado. Al menos cuatro horas de luz solar al día, pero no directamente. Y por último evitemos los lugares donde haya corrientes de aire.

Significado del tulipán.

El tulipán es una flor con múltiples colores. Cada uno significa o expresa sentimientos diferentes. Vamos a mostraros algunos. En el caso de ciertos colores su significado a cambiado a lo largo de la historia, pero la mayoría permanecen igual a lo largo del tiempo.

Por ejemplo los tulipanes rojos, como ocurre en otros casos como rosas o claveles, siempre ha estado asociado al amor verdadero.

Sin embargo los amarillos han cambiado. En un principio correspondían a un amor sin esperanza. Pero en la actualidad su significado ha mutado a una expresión de alegría y felicidad. La luminosidad de este color ha ayudado sin duda a este cambio.

El color blanco en el caso del tulipán significa perdón. Aunque en el caso de la mayoría de las flores expresa pureza e inocencia en esto el tulipán también es único.

El tulipán, un regalo.

Pero hay algo que está muy claro. Si regalamos tulipanes, sea cual sea su color, sea cual sea su forma. Ya lo presentemos en maceta, en arreglos florales como ramos o centros, o como nos apetezca, podemos estar seguros de que la persona que los reciba los recibirá con gozo y los admirará por su belleza y presencia.

Los tulipanes son muy fáciles de reconocer tanto por su forma como por su color. He leído y es cierto: «no son demasiado elegantes, demasiado románticas, demasiado grandes, demasiado pequeñas o demasiado brillantes.» son perfectas.

Regaladlas sin vergüenza.